Marchas y Contramarchas. Mientras los Universitarios promueven una marcha apoyados por la Sociedad Civil exigiendo Autonomía y presupuestos justos para las universidades, el gobierno monta una contramarcha utilizando todo el poder del estado y los recursos económicos de todos los venezolanos para tratar de doblegar la voluntad de quienes defienden La libertad de enseñar de debatir sin verse limitado por doctrinas instituidas, la libertad de llevar a cabo investigaciones difundir y publicar los resultados de las mismas, la libertad de expresar libremente la propia opinión sobre la institución o el sistema en el que se trabaja, la libertad ante la censura institucional, la libertad de participar en órganos profesionales u organizaciones académicas representativas y poder ejercer sus funciones sin sufrir discriminación alguna y sin temor a represión por parte del Estado o de cualquier otra instancia. Por un lado este gobierno que es continuidad del anterior y que tiene como objetivo imponer el Socialismo del Siglo XXI, es decir, un socialismo a la cubana, donde solo exista una verdad y es la del oficialismo, donde no se permita el debate de las ideas ni la disidencia, donde el gobierno insulta, excluye, divide, miente y apuesta a la destrucción de la Institucionalidad, donde obligan a los estudiantes a colocarse franelas rojas y marchar a favor de las políticas universitarias implementadas por Nicolás Maduro y por el otro una sociedad venezolana que defiende sus valores y principios democráticos y de allí el contundente apoyo que brindó al sector universitario, quienes responsabilizan al Ministro de Educación Superior y al Presidente de la República de excluir de la mesa de discusión a FAPUV que representa a 40.000 profesores y que defiende más que un salario la autonomía, la pluralidad de pensamiento y libertad de cátedra. De todo este panorama podemos concluir que este conflicto no gremial, este es un conflicto político ya que no se trata simplemente de un problema presupuestario o reivindicativo, se trata de un problema ideológico y de esa forma es que debemos atender esta situación y defender el sistema democrático que este gobierno quiere destruir para imponer un comunismo, por lo tanto, partidos políticos, gremios, sindicatos y la sociedad venezolana en general debemos mantenernos firmes en la defensa de un sistema de libertades y justicia.